Cadenas portacables para altas temperaturas

• Lo que se necesitaba: Tubería de energía de alta temperatura del sistema E4, compuesta del material 'igumid® HT'.
• Requisitos: virutas calientes y afiladas de más de 600 °C en todos los tamaños golpean los componentes del sistema
• Industria: Fabricación de interruptores, infraestructura
• Éxito para el cliente: se presentó al cliente un material completamente nuevo en ese momento, que puede soportar temperaturas de hasta 850 °C y soportar permanentemente la alta carga, el tubo portacables de fácil acceso reduce al mínimo el mantenimiento y los tiempos de parada de la máquina, instalación rentable, ya que se pudo seguir utilizando el carril guía existente

La empresa francesa Vossloh Cogifer está especializada desde hace más de 100 años en el campo de las instalaciones fijas para redes ferroviarias de todo tipo. Como uno de los líderes del mercado, el fabricante de instalaciones planifica, diseña y produce desvíos y cruces a medida para todas las cargas, perfiles y anchos de vía en todo el mundo. La planta de Tréveris fabrica principalmente desvíos para tranvías, con una producción total de entre 300 y 400 desvíos al año.
Todos los desvíos se fabrican en dos turnos con maquinaria moderna. Esto incluye sierras y taladradoras, bancos de fresado y una fresadora de pórtico controlada por CNC, que se utiliza desde 2002. Para proteger a largo plazo los cables de las numerosas virutas calientes, la empresa apuesta por un sistema cerrado, un tubo de energía. Sin embargo, debido a los requisitos extremos de la obra, el antiguo sistema de suministro de energía solía desgastarse al cabo de nueve meses como máximo, por lo que se implicó al fabricante y juntos buscaron una solución alternativa. Se consideraron varios enfoques, como un sistema de suministro de energía metálico, y luego se rechazaron.
El fresado de las puntas no sólo produce un elevadísimo número de virutas de todos los tamaños, sino que además son muy afiladas. "Algunas salen despedidas al rojo vivo como agujas. No son infrecuentes temperaturas de 600 °C y más," dice Matthias Krames, resumiendo las condiciones in situ. Los chips dejaban rastros de quemadura y fusión en el plástico, y la tapa del sistema de suministro de energía se abrió en algunos lugares debido a la enorme carga. Los chips penetraban poco a poco, lo que ponía en peligro los cables insertados. Como resultado, el sistema se paró repetidamente. Además, el fabricante de la planta buscaba una solución rentable que también durara a largo plazo.

El tubo de energía existente fue sustituido por un tubo de energía de alta temperatura de igus®. El uso de estos tubos de energía de alta temperatura aumenta significativamente la vida útil de la máquina, especialmente durante el mecanizado. Aquí es donde los sistemas cerrados realmente destacan, ya que protegen de forma fiable el cable de la suciedad, la humedad y el calor. En ese momento, igus había presentado® igumid ® HT′ como un material en el que las virutas calientes rebotan en el sistema de suministro de energía sin dejar rastro, incluso a temperaturas de hasta 850 °C. Y durante una inspección tras las primeras semanas, ninguna viruta se adhirió a la carcasa ni penetró en ella, y no se apreciaba ningún dibujo en el plástico. "Estamos muy satisfechos con esta solución," confirma Matthias Krames, Director de Mantenimiento de Vossloh Laeis. "La máquina ha estado funcionando sin problemas desde la sustitución. La sustitución nos mereció la pena."
Con una longitud de cadena de 61 eslabones, un recorrido de hasta 9 m y una velocidad máxima de la mesa de 10 m/min, se utiliza el sistema E4 con elementos de conexión pendulares normales debido a la gran longitud no soportada. Se complementa con la descarga de tracción integrada. Todos estos componentes tienen un efecto positivo en la estabilidad y durabilidad de todo el sistema de suministro de energía. El hecho de que los conductos de energía siempre puedan abrirse por ambos lados resultó extremadamente práctico, especialmente durante la instalación. Los cables intactos existentes pudieron insertarse rápidamente, y se siguió utilizando la canaleta guía existente, por lo que la sustitución resultó realmente rentable. Como los cables permanecen accesibles en todo momento tras su inserción en la tubería, los tiempos de mantenimiento y parada de la máquina se reducen al mínimo.
"Confiamos en que este tubo energético satisfaga nuestras necesidades a largo plazo. La experiencia de las primeras semanas y meses ha sido muy positiva," concluye Matthias Krames.