Solución
El guiado de cables adecuado que se requería se encontró en igus, con quien el fabricante de cortafiambres ha estado trabajando durante mucho tiempo. Los equipos de la empresa utilizan soluciones especiales fabricadas con
materiales para mecanizar,
cojinetes iglidur y
módulos lineales drylin. «Estamos contentos con la calidad, la flexibilidad y también con la forma de trabajar juntos, así que tuvimos claro desde el principio que igus sería nuestro primer contacto para el sistema de guiado de cables», explica Martin Hüttenrauch, director de ventas de SCHIWA.
Desde entonces, se utilizan
cadenas portacables TH3. Esta cadena portacables de diseño higiénico se utiliza allí donde los requisitos de higiene son extremadamente altos y los cables y tubos deben guiarse con seguridad. Es fácil de limpiar, cumple con la FDA, no tiene conexiones roscadas y se adapta perfectamente a los agentes de limpieza y a los productos químicos agresivos. La cadena puede tener hasta cuatro compartimentos fijos que permiten que los cables y los tubos estén bien separados unos de otros, sin dejar de tener huecos suficientemente grandes para la limpieza. Otra ventaja de las cadenas portacables TH3 son las esquinas redondeadas, que evitan la formación de gérmenes. El diseño abierto y sin tornillos también mejora la higiene al facilitar la limpieza del sistema.
Las cadenas portacables TH3 se instalaron por primera vez en la cortadora de 4 husillos de SCHIWA. «Las cadenas portacables llevan más de dos años en uso y hasta la fecha no hemos tenido ni una sola queja. Son exactamente lo que estábamos buscando. Los cables se guían con seguridad y la cadena, de color azul, llama la atención», afirma Tobias Wahl, jefe de desarrollo mecánico de SCHIWA. Al elegir el color azul, igus también asumió la idea de detectabilidad óptica, un requisito cada vez más importante en el sector alimentario.