A nadie le gusta tener el coche sucio. No da buena imagen. Por lo que no queda otra que lavarlo. Aquí es donde entran en juego los equipos de lavado de automóviles. Limpian camiones, automóviles, autobuses e incluso trenes. Por regla general, se distingue entre los puentes de lavado, los lavados autoservicio y los túneles de lavado. En los puentes de lavado, el coche pasa por una cinta transportadora con diferentes sistemas de lavado y secado. Los clientes no tienen que salir del coche. En los lavados autoservicio, la limpieza del coche se realiza a mano. Mediante limpiadores de alta presión y cepillos de espuma. La tercera forma son los túneles de lavado. En los que un mecanismo desplaza el coche a lo largo del túnel. Los cepillos limpian el coche de forma totalmente automática. Para satisfacer las demandas cada vez mayores de los sistemas de lavado modernos, el especialista en plásticos de movimiento igus ayuda a aumentar la vida útil de sus sistemas con plásticos de alto rendimiento sin lubricación y autolubricantes, a la vez que reduce los costos.
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